No es para menos pero mi
inspiración se ausenta al momento de teclear mi nota “Maletera”; tratando de
revivir imágenes del pasado entrevistando a personajes que contribuyen con la
rica historia deportiva en la comarca, digo esto porque me es sumamente difícil
asimilar partidas inesperadas como la del conocido futbolista, dirigente y
entrenador Juan Amesquita Cruz; si bien es cierto no lo gocé en su mejores
tiempos, pero bastó tratarlo en mi diario andar por los escenarios deportivos,
para darme cuenta de su caballerosidad en mis requerimientos de prensa
deportiva o cuando gentilmente facilitaba los datos estadísticos del Campeonato
de la Amistad “Copa Southern” ; sin olvidar las responsabilidades al frente de
un equipo en el balompié oficial; así como también dejando toda su experiencia
en el potencial futbolístico del presente y futuro en ésta bella ciudad… Juan
tenía mucho para dar y eso era visible; sino que lo diga mi tía Adela Vásquez
de Roncalla, con quien coincidimos en los funerales del extinto deportista que
dejó éste mundo de una forma hasta hoy difícil de asimilar; considerando que
gozaba de excelente salud; trabajador incansable quien perdió la vida al ser
impactado por una unidad vehicular, la noche del último miércoles próximo a
Ciudad Jardín… Mis más sentidas condolencias a la familia y amigos; si queremos
mantener viva su imagen y recordarlo por siempre, solo debemos imitar su
actitud personal en su paso por éste incomprendido mundo, su añorada Urba Ilo
extrañará su presencia; así como también el tradicional club Atlético Ileño, la
gentita del Fútbol de Tíos y sería largo enumerar su largo y fructífero
caminar; como siempre se afirma que el Todopoderoso los lleva de inmediato a
sus preferidos y eso al parecer hizo con Juan Manuel; a quien echaremos de
menos en el gramado Mariscalino vestido de cómodo buzo.
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