Mi aterrizaje forzoso con panzazo
incluido al ingresar a matrimoniar en conocido restaurant, la noche del último
sábado, me descuadró un tanto mi recargada agenda dominguera; que tuvo dos
actividades ineludibles, claro una más importante que la otra y mereció mi
mayor atención después de incontables lunas en que fallé olímpicamente al
“Barbitas Menor”; espero llegado el momento no tome muy en cuenta mi
irresponsable dejadez… Aprovechando el poco tiempo disponible tuve una fugaz visita
al estadio Mariscal Nieto, donde se reanudaron los partidos del balompié
copero; que tiene a dos equipos invictos que podrían mantenerse hasta el final
de la Rueda con proyecciones a seguir avanzando, aunque no me atrevo a
vaticinar resultados favorables por adelantado, sabiendo perfectamente que
bastante camino por recorrer… Gálvez subió como la “Espuma”; aprovechando la
debilidad de los Uruchitos a quienes los dejaron sin respiro, con la media
docena de goles, esos que complican su situación cortesía de los abultados
marcadores; muy difíciles de remontar en sus próximos compromisos… Becerra se
repuso rápidamente del anterior revés, al dar cuenta del Episa Corazón cuyas
intensiones es meterse entre los cinco grandes; objetivo no tan lejano que
digamos, que se debe traducirse en resultados positivos; como era de esperarse
ADEBA sucumbió ante los voraces picotazos del cuadro Canario, que no lo
tuvieron tan fácil jugando con los escurridizos pupilos de Juan Roncalla, los
cuales cerraron el pico un par de veces a los trinadores punteros y que
tiemblen sus siguientes rivales… El partido de fondo fue animado por Chalacos y
“Chungungos” que se quedaron a oscuras por acción del travieso “Wally” Urbina,
al parecer el ex turquesa no imaginó la reacción de los eléctricos que por poco
los carbonizan con cuatro mortales descargas.
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