En una tarde de miércoles, de
yapa friolenta los “Chungungos” nos hicieron tempranamente volver a la realidad
en cuanto al balompié porteño se refiere; los motivos saltan a la vista,
pero nos quedamos con el casi, casi
ganamos, frase que debe eliminarse en los partidos que restan por jugar;
siempre y cuando el plantel energético ingrese a la cancha de juego con
suficientes energías para encajar los balones en el fondo del arco rival; antes
de quedarse en tinieblas tal como sucedió frente a los tacneños con el tanto de
Laura en el primer tiempo… Con el escore en contra se fueron a vestidores para
re-enchufarse de nuevo y eso fue notorio con las descargas de “Wally” Urbina y
Diego Millo que hizo abrigar esperanzas para una merecida victoria producto del
empeño que le pusieron durante el complemento; hasta que Vera sobre el final
desestabilizó a los defensores y arquero turquesas para empatar el marcador a dos
por lado; no sin antes recordar también que los “Pitadores” mistianos no
cobraron un clarísimo penal y otras cosillas más; detalles que no debe distraer
la producción del estratega Marco Sánchez y sus pupilos que se engolosinan con
el balón… Con éste resultado las pretensiones de las débiles “Torres” quedarían
solo allí, similar suerte también correría el conjunto Canario que cayó 2X1
ante el cuadro de San Periquito que se repuso de la caída pasada al enfrentar
al Futuro Majes, que dicho sea de paso desinfló en su propio reducto al Globito
de la Pampilla Characato… Con estos resultados, al respetable tampoco le dan
ganitas de ir al estadio; sino habrá que preguntar a don PP Ríos, cuánto fue el
déficit de la fecha, si el sencillo alcanzó al menos para cubrir los gastos o
completó el dueño de casa, me parece que así fue por el escaso público que
estuvo viendo el partido desde las incómodas tribunas del estadio Mariscal
Nieto.
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