Es difícil aceptar los caprichos
de la vida; quizá muchos estén de acuerdo con esta apreciación personal después
de comprobar dos sucesos casi al mismo tiempo; pero contradictorios y paso a
detallar; el miércoles al medio día fui testigo de la felicidad que irradiaba
el Profe Liendo al ser reconocido con las Palmas Magisteriales en el Grado de
Maestro; ante la algarabía de sus alumnos, colegas, familiares e invitados
quienes estuvimos en el Cole Mercedes Cabello; junto al buen “Rubidius” Gamarra
experimentado Maestro de Ceremonia y Relacionador Público de la Municipalidad
Provincial; quien con toda seguridad sacaba fuerzas de lo más profundo de su
ser para disimular el pesar por la repentina partido de su Maestro de infancia
Prof. Jaime Chávez Válcarcel; al cual conocí muy de cerca en una Reapertura de
Mantenimiento de la Plaza El Maestro en el tradicional Barrio Magisterial; si
bien es cierto no lo traté muy de cerca; pero me bastó saber que su
personalidad imponía respeto y mucho cariño tal como lo confirmaron sus fieles
amigos, ante el féretro que contenían sus restos mortales, los que ahora
descansan en su última morada del cementerio San Jerónimo… Composiciones que
seguramente no necesitaron de mucha inspiración, para destacar las cualidades
que dejó un hombre con muchos principios y valores, preocupado también por sus
conciudadanos en el periodo de Consejero Regional, según refirieron Rubby, su
padre don Ricardo Gamarra y Menéndez, el Profe “Superman”, perdón quise decir Adriazola
entre otros… Yo solo recuerdo el llamado de atención que me dio el Profe seguro
con sobrada razón una frígida mañana sabatina, en la Plaza de Armas en el
presente año por demorar el inicio de la caminata con cientos de niños
peloteritos rumbo al estadio Mariscal Nieto para la inauguración del Campeonato
de Fútbol Menores.
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