Días atrás leí con mucha
preocupación en el Face la desilusión de un entusiasta promotor del juego
ciencia en la comarca; hacia mi persona y el cargo que desempeño en el Gobierno
Local, donde por más que uno desee, es difícil atender los pedidos para el
desarrollo y promoción del deporte; porque no se cuenta con los presupuestos
económicos, a pesar de los múltiples pedidos cuando se elabora el Presupuesto
Anual; por la sencilla razón de que es insuficiente, como si fuera poco deben
priorizarse otros gastos; del Canon Minero ni pensarlo; así digan por allí que
solo sirve para sembrar cemento en toda la ciudad; que dicho sea de paso eso
exige la comunidad, especialmente la pampina a quienes se les está entregando
espacios que sirven para una sana recreación… Por otro lado, hay que tener en
cuenta la informalidad con la que venimos trabajando, la que impide gestionar
apoyos económicos de algunas empresas amigas cuyos funcionarios o trabajadores
tienen en cuenta que el deporte también es importante en la formación de ser
humano; por otro lado debo indicar que somos muy cómodos, nos gustas pedir y
exigir a los demás; para que ellos hagan lo tranquilamente podemos
involucrarnos, lo que más terrible, cuando tuviste la mejor oportunidad para
sacar adelante al deporte; como dirigente o como amigo cercano de quien estuvo
en el poder por largo tiempo; cuando había mejores oportunidades y en éste
momento no estaríamos forzando soluciones para contar con un moderno estadio;
tal como lo tienen nuestros vecinos de Moquegua y hasta la pequeña localidad de
Ite; hoy con mucho conocimiento de causa imploro al deporte ileño; paciencia y
solo paciencia; así como alguien me lo dijo una vez hace más de una década,
cuando el cuadro “Chungungo” ganaba y ganaba sus compromisos en el Fútbol Macho
de la Copa Perú, tiempos idos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario